
Por Atilio Borón
Pedro Castillo llega al tramo final del recuento electoral con una diferencia de unos 80.000 votos a su favor. Falta apenas la ratificación oficial de su victoria, cosa que deberá resolverse en las próximas horas. La ambigüedad de la cifra se debe a la variación infinitesimal que podría resultar del examen de actas observadas, incorrectamente llenadas o con firmas ilegibles. Pero, aún así, la victoria del maestro rural es irreversible, y eso explica que desde el martes a la tarde la usina de rumores y mentirasde la derecha peruana y continental haya comenzado a batir el parche del «fraude». Pero Adriana Urrutia, la politóloga de la Asociación Civil Transparencia, institución que desplegó 1.400 observadores en el Perú y en los centros de votación en el extranjero rechazó, de inmediato esa acusación al declarar que “no hay ninguna evidencia que nos permita hablar de fraude electoral” » Esta afirmación es coincidente con la que hicieran los observadores de la Unión Interamericana de Organismos Electorales y nada menos que los enviados de la OEA.
(más…)