Para los confundidos por la poderosa cruzada propagandística contra Cuba y no creen que la guerra económica, comercial y financiera impuesta hace 62 años por Estados Unidos, es responsable directa de las penurias que vive la Isla, podrán tener mejores evidencias con los recientes pasos dados por aquellos que, desde la catedral de la mafia terrorista anticubana, exigen más sanciones contra el pueblo, aun que traten de disfrazarlas con el gastado slogan de que “son contra el gobierno comunista”.
El presidente Joe Biden es recibido por el expresidente Barack Obama cuando llega a la ceremonia de investidura en el Capitolio. Foto: AP.
Por Ángel Guerra Cabrera
Robert Bob Menéndez es un prominente senador cubanoestadunidense por el Partido Demócrata, pero sus lealtades están con Donald Trump en lugar de con el presidente Joe Biden. En Nueva Jersey, estado que representa en el Senado, los enterados veían con asombro hace unos meses el desinterés que mostró por la campaña presidencial del candidato de su partido, y cómo desviaba fondos de la misma para impulsar la relección a la Cámara de Representantes de su amigo, el también cubanoestadunidense y enemigo jurado de la revolución cubana Albio Sires. Al igual que los legisladores republicanos de origen cubano Marco Rubio y Mario Díaz-Balart, Menéndez se manifestó reiteradamente contra la política del gobierno de Obama y Biden hacia Cuba, de la que llegó a decir que era «dramática y errada«, mientras clamaba con ardor junto a ellos por el endurecimiento del bloqueo.